
Grover Yapura A.
Guste o no, es uno de los símbolos del sindicalismo boliviano, de la política nacional y gestor del Instrumento Político llamado MAS y cultor ideológico del presidente Morales. Hoy, a Filemón Escóbar se lo siente frustrado y, a costa de críticas, con la decisión de mostrar los errores que las corrientes de izquierda y él mismo cometieron en el país en los grandes momentos históricos. Junto a su bolsa de coca, aún cree que el Primer Mandatario puede evitar otra frustración y contener a quienes ve como la extrema derecha.
Como dice, el MAS ha nacido con la idea de no cometer los errores de la izquierda tradicional, ¿pero ha sido así?
En el trópico no había la conciencia de votar por sí mismos. Siempre votaron por partidos extraños, como los campesinos votaron por el MNR y los mineros por Banzer. Se enseñó a votar por el Instrumento Político, el MAS.
Con la fuerza del sindicato…
Claro, se cambió a la visión de que los sindicatos son alternativas del poder, aunque ellos decían que eran sindicatos nomás, pero lograron ser instrumento político, lograron el 54% de votos, y llegaron al poder.
Como protagonista del sindicalismo, ¿no cree que los sindicatos contribuyeron a la crisis política?
En el movimiento sindical hay una fuerte corriente gremialista. Me das una oportunidad para hablar: sólo en momentos muy excepcionales la clase obrera tiene una alta conciencia política. Por ejemplo, después de la revolución de 1952, en Catavi y Siglo XX, el gerente convoca a una asamblea y dice que para respaldar la nacionalización de las minas se debe mantener el ritmo de producción; entonces, la Asamblea aprueba que mientras no se apruebe el decreto de nacionalización, no se cobrará salario y ningún contratista faltará al trabajo. Pero esa disciplina consciente se rompe con el golpe de Barrientos. Si te fijas hoy, ¿qué piden los sindicatos?, hay una conciencia gremialista suicida para el país.
La crisis del país tiene que ver con los partidos y con el proceder de los sindicatos…
Claro, el sindicato, sin una corriente ideológica que combata al corporativismo, es suicida para ellos mismos. Por ejemplo, en Huanuni, que tiene capacidad productiva, se puede hacer que la empresa sea de alta rentabilidad, pero no ocurre…
¿Cómo divide la responsabilidad de la crisis política?
El aparato productivo manejado sin alta conciencia política contribuye a un proceso de regresión y con parte de ello tiene que ver el movimiento obrero boliviano, y si combinas ello con la actitud de los partidos de turno, la combinación es trágica para el país. Hoy tenemos la oportunidad de no volver a esos errores.
Al Presidente lo consideran antes que Jefe de Estado un buen sindicalista. ¿Es acertado este criterio?
Es bien difícil decir quién es buen Presidente, quién buen sindicalista. Estas acusaciones contra Morales sólo simplifican las cosas. En el fondo, ustedes, los medios de comunicación, deben mostrar que hoy se está cometiendo un error histórico. Si Evo, como declaró, quiere ser el caudillo de la autonomía habría ligado la propuesta de Andrés Ibáñez con la de Zárate Willka, y sólo con eso Morales pasaba como el mejor presidente de la historia de Bolivia.
¿El MAS nació con criterio autonomista?
El MAS sabía y tenía información de quién es Zárate Willka, quién es Andrés Ibáñez. No los ignoraba y además Evo Morales dijo que él iba a ser el caudillo de la autonomía. Entonces, hay que preguntarse por qué no ha sido terco para mantenerse en la autonomía. Ha cambiado y resulta que tenemos el problema de la capitalidad, por ejemplo.
¿Y en qué momento cambia de opinión?
No sé en qué momento se convierte en el enemigo de la autonomía. Es decir, no se produce la regeneración de Bolivia y estamos enfrentados, debemos reponer el respeto recíproco.
Entonces, ¿hoy cómo se aplica la tesis de respeto recíproco?
El Presidente tiene que dar un giro de 180 grados, ser el caudillo de las autonomías. Así, evitas la pugna entre oriente y occidente.
Es decir, va a tener que volver a fojas cero con el proyecto de CPE…
La novela Aluvión de Fuego incluye un "Manifiesto de la República del Kollasuyo", que plantea que en Bolivia hay cinco nacionalidades, ocho pequeñas y otras más pequeñas, y lo liga con la tesis leninista y estalinista: un Estado plurinacional. Es decir, con la ex URSS, y eso es lo que está hoy en la Constitución del MAS. El (Raúl) Prada y el (Roberto) Aguilar, a nombre de los indígenas, plantean una tesis estalinista, el Estado plurinacional, plantean una línea regresiva. Hay que replantear la discusión. ¿En Bolivia existen 36 pueblos indígenas?, ¿o sobre todo somos civilización? No estamos en Rusia, estamos en Bolivia y aquí hay dos sociedades, dos civilizaciones.
¿Somos un Estado plurinacional? ¿Somos 36 pueblos?
Cuando lo planteas así, replanteas el drama de la Unión Soviética y eso podría ocurrir en Bolivia. Mira cómo llegó a ser el caso de Yugoslavia, Albania, Chechenia, cuando en Bolivia ya convivimos entre dos civilizaciones. Yo no defiendo la tesis de la Unión Soviética, veo una civilización andino-amazónica y otra occidental-individualista.
Desde los 36 pueblos, ¿en cuál se inscribe usted y en cuál el presidente Morales?
A mí me están botando del país porque no tengo pues el origen que reclaman y, además, no soy comunitario. Y al Presidente lo veo como aymara.
¿Cómo resuelve la crisis política desde la tesis que plantea?
Es simple cuando lo entiendes. Yo no quiero aplastarte ni quiero que me aplastes, no quiero asimilarte ni que me asimiles a tu cultura. El respeto recíproco abre un espacio enorme para la complementariedad de opuestos. La naturaleza sobrevive gracias a la complementariedad de sus opuestos, como el mismo ser humano. Tiene que haber un equilibrio. En el caso de Bolivia, no hay oriente sin occidente, no hay occidente sin oriente.
Pero habrá que considerar que la extrema derecha apuesta al fracaso del Presidente, como la izquierda a las opciones suicidas. ¿Cómo las desactiva?
Es que ya convivimos desde la República. La Pachamama convive con Cristo. No sé cómo vas a pintar esto, pero no va a pasar nada tras el 4 de mayo, te voy a dar la explicación andina. Es la fiesta de la Cruz en el Norte de Potosí, en Cochabamba se hará la fiesta de la Veracruz o en Copacabana, mayo es el mes del esplendor. Así es Bolivia. El mundo andino festejará la fiesta de la Cruz.
¿Por qué el Jefe de Estado apuesta a un proyecto excluyente?
No creo que el Presidente sea excluyente, sino estaría teniendo una mentalidad occidental.
¿Es decir que la izquierda demuestra otra vez que no sabe gobernar?
No es eso, ignoran el país, siguen gobernando con copias del exterior. Esto es lo más cojudo que se ha hecho, semejante coyuntura que estamos perdiendo.
Este proyecto político podría fracasar…
Tenemos la obligación de que este proceso no se transforme en otra frustración del país, la revolución de abril se transformó en neoliberalismo, lo de Barrientos y Juan José Torres dio lugar al gobierno de Banzer, el proceso de la UDP dio paso al neoliberalismo. Tenemos la obligación de que este proceso salga victorioso y va a salir victorioso con el respeto recíproco.
El Mandatario es aún la figura para salvar este proceso.
Si el Presidente retorna a los principios de la filosofía andina y entiende eso, este proceso se salva, pero eso supone decir a la izquierda tradicional que está en el aparato estatal, que no jodan con sus posiciones de confrontación, porque eso da paso a que joda más la derecha.
Una vez más, la izquierda es experta en complicar procesos.
Repetimos los errores de 1946, del 64. Los que se han metido al MAS por la ventanilla en la campaña del 2002, plantean la tesis de la confrontación.
Román Loayza, por ejemplo, tiene una posición crítica al entorno de Evo.
Los del entorno del Presidente son los residuos del pensamiento de la izquierda tradicional. Esa clase política dio paso a la derecha que estaba aplastada y ésta ha recobrado la vida. Pero esto se resuelve si Evo es el caudillo de la autonomía.
Para dar ese paso, el Presidente va a tener que cambiar de gente, ceder en posiciones de su proyecto de CPE…
En el momento en que decida ser el caudillo de la autonomía, el resto son cosas pequeñas. Es una cuestión de visión, si Evo es caudillo de la autonomía, se resuelven los problemas del país. Con eso, salimos victoriosos. Ahora estamos enfrentados.
En el movimiento sindical hay una fuerte corriente gremialista, sólo en momentos excepcionales tiene una alta conciencia política, hoy tiene conciencia suicida.
Ignoran al país, esto es lo más cojudo que se ha hecho, estamos perdiendo una gran coyuntura.
No va a pasar nada después del 4 de mayo. El mundo andino festejará la fiesta de la Cruz.